FC10: entre la curaduría y la experimentación

FESTIVAL CONSTANTE 10ma EDICIÓN

11 de diciembre de 2024
Disponible en:
Español

FESTIVAL CONSTANTE. DÉCIMA EDICIÓN

Festival Constante – 10ma Edición, dirigido por Juan Jesús Guiraldi. Curaduría: Mauro Cacciatore, Jesús Guiraldi. Producción general: Mauro Cacciatore, Ve Di Lisio, Juan Jesús Guiraldi, Myfanwy Spannaus, Asociación Civil Movimiento Constante. Jurado Filtros Experimental: Florencia Ciucci, Moisés Moe  (Iron Skulls Co.), Héctor Buba Plaza (Iron Skulls Co.). Jurado Competencia Experimental: Bryan Doisy, Jesús Guiraldi, Anabella Pirosanto. Dj Experimental: Lucas Yaskolowski. MC Experimental: Adam Feiguin. Músico Experimental: Guri Oruan. Comunicación: Ve Di Lisio, Mauro Cacciatore. Diseño Gráfico: André Garay Gutierrez. Fotografxs residentes: Ale Carmona, Florencia Fernandez, Matías Giberman. Auspiciantes: Asociación Civil Movimiento Constante, Institut Ramon Llull, Centro Cultural España – Córdoba, Inaem, Aecid. Aliados: Galpón Face, Videodanzaba, Festival Revés, Doble M. Galpón FACE, Dean Funes 2142, CABA, Argentina. Actividades: del 31/10 al 10/11/2024.

La palabra “experimental” es apta siempre que se entienda no como la descripción de un acto que luego será juzgado en términos de éxito o fracaso, sino simplemente como un acto cuyo resultado es desconocido.
Silencio, John Cage.

 

Al momento de recibir la propuesta de armar un pequeño escrito como apertura de este dossier de textos críticos, pensé mucho en el enfoque que debía darle. ¿Qué decir aquí que no haya sido dicho en la gacetilla o en el catálogo? Quizás sea el espacio para compartir algunas ideas internas, algo de la cocina, ahora que el paso de los días permite ver la cosa con cierta distancia. Quizás sea también el espacio para pensar “en voz alta” aquellas cosas que, desde la escritura, damos por sentado que todas las personas entenderán de la misma manera (como si el desfase entre las condiciones de producción y reconocimiento no fuera algo que atraviesa cualquier situación discursiva). También es una buena ocasión para jugar a la intertextualidad y con la creación de hipervínculos para trazar nuevas relaciones con otras voces e ideas que no hagan más que alejarnos del adjetivo “pequeño” con el que describí este texto al comenzar, pero que, en definitiva, aportan a la problematización y al engrosamiento conceptual que tanto nos enriquece.

Dentro del equipo de producción de Festival Constante solemos decir que cada edición nos deja las bases sentadas para la próxima, trabajando sobre los pasos dados para propulsarnos hacia el siguiente y así seguir adelante. Si llevamos a fondo esta propuesta, debemos pensar que esta edición se viene construyendo incluso antes de que el Festival existiera como tal, con las acciones previas y deseos que se congregaron para que el espacio tome forma y logre sostenerse en el tiempo. A la vez, el hecho de celebrar este año la 10ma edición nos invitó a mirar hacia atrás, no tanto de manera nostálgica, sino con la precisión de un analista que busca trazar el camino andado para proyectarse hacia un futuro que quizás no hubiésemos vislumbrado en nuestra 1er edición y sin embargo, ¡aquí estamos!

Desde 2014 el Festival Constante impulsa y alberga la experimentación e investigación del movimiento y la escena. Ahora bien, ¿qué implica experimentar? En el terreno de las artes suele emplearse esta palabra para identificar aquellos enfoques ligados a la renovación de las formas, las prácticas y los lenguajes. La conformación de nuestra plataforma está determinada por este verbo, y el surgimiento del Festival persigue el deseo de que aquello que sentimos, pensamos y vivimos en relación con la experimentación del movimiento y de la escena no quede como un asunto interno, sino que sea el motor para la emergencia de un espacio donde dichos tópicos puedan engrosarse al recibir otras interpretaciones, nuevas posibilidades, distintas inquietudes. El objetivo es que aparezcan grises impensados que felizmente nos interpelen y nos excedan, y que pongan en crisis la cosa antes de que esta se cristalice.

Me interesa, en lo personal, pensar aquel abanico que se abre entre los campos de la curaduría y de la experimentación, y el espacio liminal que se despliega a partir de esta combinación. Decía líneas atrás que lo experimental remite a la exploración, a la ruptura y desestabilización de los límites y, por su parte, lo curatorial, implica la posibilidad de concebir una plataforma conceptual y  procedimientos a partir de los cuales lxs artistas puedan desarrollar sus producciones, trascendiendo de manera conjunta la idea de una mera programación de actividades agrupadas. Este tipo de enfoque genera nuevas instancias de realización que ponen en relación creaciones de lenguajes diversos con el fin de generar una nueva experiencia artística que quiebra formatos y formas de producción y recepción estandarizadas, canónicas. Dentro de esta lógica, cada obra puede explotar aquellos aspectos que le dan identidad y singularidad y, a la vez, organizarse dentro de un entramado de redes artísticas y culturales que las integran y contienen.

En ese sentido, me permito destacar algunas áreas dentro del Festival donde el cruce de disciplinas, enfoques y propuestas aconteció de una forma sumamente orgánica, permitiendo su desarrollo y, al mismo tiempo, generando una instancia de enriquecimiento que trascendió las propias fronteras. 

Ale Carmona

 

Como todos los años, el área pedagógica del Festival convoca a investigadorxs de diversas disciplinas cuyas propuestas enriquecen el universo de posibilidades del cuerpo en movimiento. La edición de este año puso en resonancia las propuestas de Iron Skulls Co. (compañía de danza radicada en Barcelona que investiga la hibridación de la danza urbana con otras disciplinas artísticas), Bryan Doisy (bailarín, cantante, compositor y actor francés cuya investigación presenta fuertes influencias del HipHop y de la danza contemporánea), Anabella Pirosanto (artista francoargentina cuya búsqueda propone empujar los límites de la expresión y el movimiento) junto a las propuestas de lxs integrantes de la plataforma Movimiento Constante, representada por Juan Jesús Guiraldi, Florencia Ciucci y Facundo Rivara. En  conjunto, todas las propuestas lograron dar un panorama del amplio universo de la investigación de movimiento. Como heterotopías, se conformaron como mundos dentro de otros mundos que reflejan y, al mismo tiempo, alteran lo que está fuera. 

Por su parte, la programación escénica reunió estrenos y reposiciones de lxs docentes invitadxs y dos instancias que implicaron otros tipos de intercambios. Siguiendo la línea del cruce de lo pedagógico con lo escénico, dedicamos dos jornadas (y algunos espacios extra dentro de la programación general) a presentar las propuestas surgidas dentro de EME 2 – Yo no pienso en peligro, programa dedicado a la investigación y entrenamiento que propone concebir la escena como un espacio de práctica. Las producciones aquí generadas persiguen el objetivo de revitalizar la potencia del cuerpo en acción para transitar diversos territorios, reinventar lenguajes e imaginarios y, junto con ello, reivindicar el movimiento como lenguaje universal y soporte suficiente para la creación. Este proyecto reunió a un poderoso grupo de practicantes del movimiento que, acompañadxs por el equipo de docentes e investigadorxs de la plataforma, compartieron un proceso para ampliar sus herramientas de investigación y abrir preguntas que despierten y alimenten un cuerpo versátil e híbrido que baila, juega y actúa físicamente. 

En el transcurso, cada participante fue construyendo el marco escénico para el desarrollo de sus ideas de movimiento, bajo la tutoría de un grupo de docentes/investigadorxs que guiaron y acompañaron su proceso creativo desde diversas áreas, tanto técnicas como creativas. Como tutor de los proyectos y, a la vez, curador del Festival, uno de los grandes desafíos fue cómo lograr que cada propuesta se desarrolle en su máximo potencial, respetando el deseo de cada persona, pero que a la vez, el resultado pueda tener sentido y lógica en el marco del Festival. ¿Hasta qué punto injerir? ¿Cómo lograr que convivan armónicamente los tiempos de producción del Festival con el tiempo de la creación y el tiempo del proceso de aprendizaje, análisis y reflexión? ¿Cómo organizar conjuntos, estableciendo direcciones y guías que ayuden a elaborar y entender la cartografía emergente? 

Por otro lado, como ya es costumbre, en nuestro afán de tejer redes, la programación del Festival se puso en diálogo sensible con la propuesta curatorial desarrollada por Doble M (plataforma de curaduría y producción conformada por Marina Andreotti y quien suscribe) que integró los estrenos de la obra Antro de Doxa Morfa, los videodanza Migrante de Inés Armas, El bailarín y la máscara de Marina Andreotti y la reposición de la video intervención Lo único que puede hacer un cuerpo de Nahuel Alonso La Valle. Además, a modo de homenaje simbólico al Festival Internacional VideoDanzaBA (Dir. Silvina Szperling), pionero en la región, que, con 28 años de historia celebró en 2023 su edición despedida, compartimos una selección de obras premiadas por el jurado, que incluyó Parque de Iván Asnicar y Ailén Cafiso y Habitantes de Agustín Detzel. Aparece aquí algo muy particular: la superposición de voces o figuras que genera una especie de mamushka de curadurías en la que una curaduría (como la de VDBA) se pone en diálogo con la propuesta de Doble M que a la vez se inserta dentro de una propuesta paraguas como la del Festival. 

El planteo de este programa particular dentro del FC10 surge de la motivación por complejizar el pensamiento de la investigación del movimiento al ponerlo en relación con el universo de lo audiovisual y de la tecnología. Mirando a nuestro alrededor, observamos un presente caracterizado por danzas espontáneas, líquidas, inasibles, difíciles de catalogar dentro de los cánones heredados. La respuesta ante esto es apostar a la creación de un anticanon que abra posibilidades, que invite a habitar los grises y que lleve la atención hacia lo fronterizo y lo liminal. Ante un presente escurridizo, ¿cuál es la danza del futuro que vislumbramos? Cuando estas danzas esquivas se encuentran con tecnologías de registro y fijación surge la utopía de capturar lo inasible y, con ella, el motor para mantener las cosas en movimiento, encontrando nuevas formas de relacionar lenguajes, de generar crisis que sacudan los lugares conocidos, logrando una expansión que transgreda los bordes entre un lenguaje y otro haciéndolos porosos, dejando que se contaminen a partir de dar rienda suelta a la creatividad. 

Ya en los 60´ Marshall Mc Luhan (filósofo y teórico en medios) ocupaba los términos Extended mind y Expanded networks para referirse a los medios (en particular a la televisión) como una extensión del hombre. Sin embargo, como en casi todo, el contexto modifica el sentido de los conceptos y nos lleva a pensar que quizás lo expandido no pertenezca a un espacio o a un tiempo determinados sino que es aquel factor que nos permite entender una obra desde una orilla diferente a la que propone el canon asociado a su materialidad corporal. No dejo de pensar en cómo la curaduría, en tanto metadiscurso, nos permite investigar objetos con el fin de revelar no sólo sus rasgos y cualidades, sino también los sistemas de configuraciones que se van inventando en el proceso de creación y circulación, y cómo, a su vez, esto nos permite generar un nuevo canon, caracterizado por lo híbrido y lo mutante.

Ale Carmona

 

Por último, me gustaría señalar la instancia de diálogo disciplinar que sucede dentro de la Competencia Experimental, un espacio de puesta en acción de las infinitas posibilidades del movimiento que parte del formato tradicional de competencia de danza urbana pero que lo trasciende, ya que no se cierra a ningún estilo en particular, sino que se focaliza en la investigación del movimiento y la composición instantánea. A su vez, el evento contempla una instancia previa de Filtros en la que se seleccionan las personas que participarán de la Competencia oficial. El objetivo es el de horizontalizar la competencia a partir de dar el lugar para que todxs lxs competidorxs transiten por un volumen mayor de pasadas, dejando de lado el factor eliminatorio. La Competencia, lejos de ser una plataforma de enfrentamiento, es un dispositivo de creación instantánea, de apertura a lo inesperado y de intercambio genuino. Invita a compartir el presente, jugando y atravesando la experiencia de la improvisación y su naturaleza de sorprendernos con lo impredecible. 

Con el fin de seguir apostando a la puesta en común de inquietudes y puntos de vista, previo a la Competencia, tuvo lugar el conversatorio La experimentación en movimiento, un espacio de reflexión y diálogo sobre las particularidades de la experimentación en el área del movimiento, la inestabilidad del concepto y sus posibles modificaciones en el tiempo. Se habló, entre otras cuestiones, acerca de  cómo el movimiento puede transformarse en una herramienta de autodescubrimiento, expresión, conexión y conocimiento. Este espacio contó con la participación de lxs competidorxs de la Competencia Experimental y de  integrantes de la plataforma Movimiento Constante.

A lo largo de los años, el Festival se convirtió en un lugar fundamental para la investigación del movimiento y en una importante plataforma de visibilidad, tanto para artistas e investigadorxs consagradxs como para los nóveles. Al igual que en las ediciones anteriores, nos moviliza el fuerte deseo de generar un espacio de encuentro, de celebración, donde lxs artistas puedan compartir sus universos creativos, aportando a la transformación y evolución de los imaginarios colectivos. Y, como de cruces e intercambios se trata (y porque todo indica que de breve por aquí no hubo nada), dejo el espacio disponible para las voces de las compañeras de Loïe Revista que estuvieron acompañando estas actividades. Confío en la potencia de un relato compartido, que integre diferentes puntos de vista que puedan observar (felizmente) desde otros ángulos aquellas cosas que desde adentro no llegamos a apreciar en su totalidad, llevando la atención a otras aristas y trazando nuevos nodos de conexión que, como rizoma, se despliegan de manera abierta y no lineal.

Ale Carmona

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Acerca de:

Mauro Cacciatore

es Licenciado en Curaduría de Artes (UNA). Egresado del Taller de Danza Contemporánea del Teatro General San Martín con mención especial en reconocimiento a su proceso de estudio. Desde 2012 participa como becario de los workshops del Merce Cunningham Trust (NYC) logrando en 2022 la certificación oficial para la enseñanza de Cunningham Technique. Desde 2016, es Curador y productor del Festival Constante (Dir. Jesús Guiraldi) y desde 2019 es parte del Festival Internacional VideoDanzaBA (Dir. Silvina Szperling), destacándose su participación como Curador en Jefe en la edición 2023. Es docente del Taller de Danza Contemporánea y UNA – DAM además de coordinador del programa EME de la Plataforma Movimiento Constante (Dir. Jesús Guiraldi). Integra el Grupo de investigación de Danza y Tecnología (Dir. Silvina Szperling- Susana Temperley) en el marco del IIEAC. Escribe para la revista LOIE – Revista de danza, performance y nuevos medios. Sus proyectos han recibido apoyo del FNA, Mecenazgo – GCBA, Prodanza, Fundación Williams y Fundación Amigos del Teatro San Martín.

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