A partir del año 2011 con el cierre de la Merce Cunningham Dance Company (MCDC) cobra vida el Merce Cunningham Trust (MCT) cuya misión es llevar el legado artístico de Merce Cunningham hacia el futuro. Desde ese momento, el Trust ha buscado mantener vivo el trabajo de este artista compartiéndolo con la comunidad a partir de supervisar proyectos de licencias internacionales, capacitando y entrenando a bailarines y repositores, realizando talleres gratuitos y otros programas públicos subsidiados, asociándose con instituciones tanto educativas como culturales y apoyando proyectos de investigación.
Gracias al generoso apoyo de la Fundación Williams tuve el honor de participar, junto a un selecto grupo de personas, de un Workshop destinado a la preparación de futuros repositores de la obra de Merce Cunningham. Allí, nos abocamos al estudio de la obra TV Rerun (1972). Carolyn Brown (ex MCDC 1953 – 1972) la describe como “una obra en la que todos aprenden el mismo material, pero son libres de elegir espontáneamente durante la performance qué partes desean interpretar”. Así pues, esta obra permite abordar de lleno la indeterminación, concepto clave en la obra de Cunningham. Siendo una creación de principios de los 70, la relación que propone con la tecnología es sumamente interesante: se incorpora una cámara móvil que determina el espacio utilizable para entrar y salir de la escena que, además, determina hacia dónde se organiza el frente a cada momento, obligando a los bailarines a explorar cómo ser conscientes y moverse con un foco no fijo.
La actividad estuvo dirigida por Andrea Weber (ex MCDC 2004 – 2011) y se llevó a cabo del lunes 3 al viernes 7 de octubre de 2022 en el salón principal de la Judson Church (NYC). Participaron ex-bailarinxs de la MCDC (Daniel Roberts y Mandy Salva) junto a aquellas personas que completamos el Teachers Training del MCT (Lindsey Jones, Timothy Ward, Christian Allen y quien suscribe). Contamos también con la presencia de Jennifer Goggans (actual Coordinadora de los programas de estudio).
Después de una reposición muy exitosa en la Universidad de las Artes de Filadelfia, se hizo evidente que TV Rerun era una obra ideal, no solo para compartir con bailarines jóvenes, sino también para introducir maestros y bailarines experimentados en el proceso de reposición. Para poner en contexto la importancia de este programa resultan más que elocuentes las palabras de Patricia Lent (miembro del Merce Cunningham Trust y actual Directora de Licencias). Ella nos cuenta que hace catorce años, cuando fue nombrada en ese cargo, la gran pregunta que se hacía era si la obra de Merce podría existir más allá del cierre de la Compañía, si les bailarines podrían aprenderla y ejecutarla y si el público querría verla. Más allá de confiar en que el trabajo podría continuar, también era consciente de que se necesitaba contar con más personas involucradas en dicha tarea. En ese momento, Robert Swinston y un puñado de ex miembres de la MCDC eran las únicas personas que montaban su obra. Uno de sus primeros esfuerzos fue dar la bienvenida e involucrar a otres ex-MCDC en una variedad de roles diferentes. Ahora hay más de 30 ex miembres de la Compañía enseñando técnica y repertorio.
En 2022, luego del centenario de Cunningham y dentro de la pospandemia, una de las preguntas clave que apareció fue cómo poder capacitar a artistas de danza que no fueron miembres de la MCDC (quienes tal vez nunca hayan conocido a Merce o visto a la Compañía actuar en vivo) para que enseñen su trabajo. Y, relacionado con esto, cuál es la obra más apropiada para enseñar a les jóvenes bailarines que quizás conocen a Merce Cunningham solo de sus clases de historia de la danza.
Este taller de TV Rerun, concebido por Andrea Weber, Jennifer Goggans y Patricia Lent, fue un paso para encarar esas preguntas. Este programa se ubica en algún lugar entre un experimento y una prueba piloto destinado a que les repositores actuales y asistentes potenciales o futures repositores pudiéramos ayudarles a abordar algunos de los cuestionamientos.
Acerca del proceso
La investigación de Andrea Weber con TV Rerun comenzó como un proyecto realizado junto a Jamie Scott (ex MCDC 2009 – 2011) durante el primer año de la pandemia. Allí decidieron enfocarse en el trabajo de Charles Atlas (cineasta residente de la MCDC) con Merce y descubrieron que TV Rerun fue una especie de comienzo de esta prolífica colaboración. Luego de una serie de entrevistas con Charles Atlas, la pieza se volvió mucho más interesante llegando a montarse dos veces a lo largo del año (en UArts y en Greater Academy of the Arts en Hartford) con una actualización significativa: con la aprobación de Gordon Mumma (autor de la música original de la obra), Jesse Stiles fue contratado para renovar la tecnología del sensor de inclinación -incluido en los cinturones que forman parte del vestuario- para captar el movimiento y transformarlo, por medio de una aplicación, en datos que alteran la partitura musical empleada en la obra.
Durante todo el workshop, Andrea fue muy generosa en compartir la investigación que realizó sobre los diferentes registros audiovisuales y notas coreográficas (tanto de Merce como de su asistente Robert Swinston), además de entrevistas a bailarines y otras personas involucradas en la obra, lo que permitió que el abordaje sobre el proceso creativo sea sumamente amplio. También pudimos debatir sobre las decisiones tomadas en las distintas reposiciones realizadas y las razones que las movilizaron, lo que resultó de enorme ayuda para pensar qué criterios tener en cuenta al momento de tomar decisiones en una reposición para que éstas sean coherentes con la obra original.
Confío en que después de haber accedido a esa información y a la experiencia de estudiar, interpretar y poner en práctica el material (aunque sea sin audiencia) quedamos con un consistente armamento en nuestro poder para enfrentar la posibilidad de una futura reposición.
La estructura de las jornadas fue muy útil y efectiva para el tipo de trabajo realizado. Comenzamos cada día con un calentamiento (clase reducida de Técnica Cunningham) guiado por distintos integrantes del grupo, entre los que tuve la oportunidad de contarme, recibiendo devoluciones muy satisfactorias sobre mi trabajo. En la segunda parte de la jornada aprendimos las frases que componen la obra por orden de aparición; primero, todos con el mismo frente y, luego, cada uno con su propio frente hasta armar las diferentes secciones en las que se dividió la pieza para su estudio, para, más tarde, practicarlas con el agregado de la pauta de entradas y salidas. Seguir este proceso hizo que sea sencillo naturalizar el orden y la continuidad del material.
Cada día, luego del calentamiento, nos ocupamos de recuperar el material aprendido en la jornada anterior, sumando más información (claridad en detalles, direcciones, tiempos, ritmos, etc.) para luego agregar nuevas frases que generaron nuevas secciones y fueron puestas en práctica una vez más, logrando un fluido muy orgánico dentro del proceso (no hubo nada que fuera en la dirección contraria de lo que se estaba trabajando). Cada día, además, se dedicó un tiempo particular a indagar en las otras áreas que componen la obra con el estudio de sus reglas particulares (lo que sucedía con las cámaras, con el vestuario, la iluminación, la música, etc.).
En lo personal, siento un gran respeto y admiración por la obra de Cunningham. Cada vez que tengo la oportunidad de estudiar una nueva obra, siento que me sumerjo en un universo único y peculiar, con sus propias reglas y particularidades. A la vez, trabajar con ese tipo de material implica una gran responsabilidad para que las generaciones que no pudieron trabajar con él puedan acceder a su obra de la forma más fiel posible, entendiéndola tal y como es.
Siempre que participo de las actividades propuestas por el MCT tengo la posibilidad de descubrir nuevos aspectos de la obra de Merce que no paran de fascinarme y creo que ese es el motor para seguir investigando este material, compartir con otras personas la fascinación que esta obra despierta en mí.
Siento además una gran responsabilidad al ser en este momento la única persona en el país y en la región autorizada a transmitir este material, teniendo además en cuenta que el contexto actual de las artes del movimiento (lo que nosotros nombramos y consumimos como Danza Contemporánea) se encuentra muy lejano a la obra y a la estética de Cunningham, por lo tanto, a veces, se siente mayor el esfuerzo de mantener viva esa llama en un marco de esas características, aunque siempre son sumamente satisfactorios los resultados logrados en la transmisión de estos materiales.
Creo que en este gesto simbólico de mirar hacia el pasado para abordar una obra con intención de mirar hacia el futuro aparece una amplia línea temporal en la que la propuesta, lejos de perder interés y aparecer como un objeto de colección, detenido en el tiempo, se puede revalorizar lo innovador de su planteo dentro de su contexto original y seguir sorprendiéndonos de la validez que tiene en el contexto actual.
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*Foto portada: participantes de workshop 2022 sobre TV Rerun.